Fundamentación

FUNDAMENTACIÓN DE LA ASIGNATURA.

Cualquier adulto que le cuente a un niño de la era digital que rebobinaba casetes con lapiceras comprende en ese mismo instante que el salto tecnológico dado por la humanidad en los últimos años ha sido vertiginoso y grandísimo.

Ese salto tecnológico no solo distancia épocas sino también al ser humano de la naturaleza, creando una cobertura simbólica sobre el mismo planeta al que transforma desde lo inmenso a lo microscópico.

En la era de lo digital, de la genética, de lo nano y de la biotecnología, donde los procesos se vuelven menos evidentes, prevalece una incomprensión acerca de la génesis de los mismos productos y dispositivos con los que convivimos a diario.

Antes el espíritu analógico de la tecnología despertaba en muchos de nosotros una profunda intriga que podía fácilmente embarcarnos en una exploración deductiva. Uno accedía a una experiencia pedagógica en el solo acto de presionar la tecla de una máquina de escribir y ver como viajaba el tipo hasta la cinta entintada para imprimir por presión física el carácter seleccionado, uno casi que asistía así a los pensamientos de mismísimo Gutenberg, entendiendo la lógica de los tipos móviles y la impresión como medio de registro y difusión de ideas.

Hoy los mismos caracteres que componen la lengua viajan por el aire, invisibilizando el canal ante nuestros ojos, que apenas divisan un soporte capaz de graficar información sobre su superficie y de interpretar nuestra interacción táctil con su interfaz de una manera que acertadamente denominamos ‘sensible’.

El desarrollo tecnológico ha alcanzado un nivel de abstracción tan grande que en las actuales sociedades occidentales, y especialmente entre los chicos, se tiende a interpretar la tecnología aplicada a nuestras vidas desde la lógica propia del consumismo, reduciéndola a un conjunto de herramientas, instrumentos y artefactos disponibles en el mercado para dar respuestas asequibles a nuestras necesidades.

El riesgo que corremos al equiparar la tecnología a sus bienes de consumo, es el de naturalizar el consumo acrítico de productos elaborados en un proceso que desconocemos y, por lo tanto, no dominamos.

Desconocer cómo es que se crean los bienes tecnológicos y como es que esos productos finalmente funcionan, no le traerá inconvenientes a nadie, cualquiera de nosotros podría limitarse a ser consumidor y usuario de tecnología. Después de todo vienen a facilitarnos la vida, por lo que está bien que nos ayuden a liberar tiempo para dedicarlo a otros intereses. Lo lamentable es que el desinterés por la producción e innovación tecnológica sea social o que surja de la frustración por no poder imaginar el proceso de concreción de un producto o invento.

Esa es la visión que impregnará la cursada de Tecnología de Segundo Año, la idea de que entre la idea y el producto, median la investigación y el proceso de diseño. Y que estos proyectos se dan mejor cuando se distribuyen las tareas y se trabaja en equipo.

Ahora bien, no se debe reducir en este planteo el trabajo en equipo a un mero contenido actitudinal. Si bien la capacidad de colaborar es en sí misma un valor a defender en la escuela, en términos industriales y profesionales es además el camino más directo al desarrollo. El trabajo en equipo promueve la especialización, y con ella la productividad y la diversidad y calidad de los aportes personales al desarrollo global.

Esa variedad de aportes y el análisis crítico para evaluar su pertinencia antes de introducirlo en el diseño del prototipo, introduce el elemento final de esta fundamentación, que refiere a un objetivo claro: el de comprender el carácter sintético del desarrollo tecnológico y, con ello, el valor de la investigación.

Ese carácter sintético del desarrollo tecnológico se expresa en dos dimensiones, una que tiene que ver con la información (datos) y otra con el conocimiento aplicado (componentes). La selección de la información y de los componentes es lo que guiará la exploración, fundamentalmente en Internet, en función al diseño del prototipo.

De esto se espera que, más allá del objetivo propuesto para la cursada de esta materia, los chicos puedan aplicar a futuro metodologías que promuevan la autogestión de proyectos.